Durante los últimos meses un sinnúmero de artículos, webinar, encuentros y charlas en torno a la mejor manera de educar desde la virtualidad han inundado nuestra cotidianidad, la realidad actual nos ha llevado a replantear de manera significativa los alcances del aprendizaje por
medio del aula virtual y ver desde diversas perspectivas si realmente la educación ha evolucionado al ritmo de una sociedad de alto consumo tecnológico. Desde esta perspectiva The Learning Innovation Catalyst (Linc) y su fundador Jaime Pales, quienes se dedican a entrenar docentes y estudiantes de todas partes del mundo para mejorar los procesos de enseñanza y aprendizaje no solo en modalidades presenciales, sino virtuales, ratifican tras un estudio de tendencias en el mundo laboral, que los modelos educativos actuales deben adaptarse para poder responder a los retos de lo próximos años.
- Deben centrarse en otro tipo de aprendizaje como la resolución de problemas, pensamiento crítico y el uso de la creatividad.
- La educación virtual debe ser más dinámica, en constante investigación y adaptable.
- Desde muy pequeños se debe enseñar a los estudiantes la importancia de la autogestión, que el niño aprenda a aprender en un entorno virtual.
- El docente se debe convertir en un facilitador del proceso de aprendizaje, no tan solo en un transmisor de información.
- Los docente deben tener en cuenta todas las diferencias de los estudiantes en materia emocional, socioeconómica, de raza, identidad de género, habilidades, entre otras, para llevarles de manera pertinente a gestionar el conocimiento.
- En un mundo digital el modelo educativo, debe priorizar la comunicación y la interacción con otras personas, la inteligencia emocional hará la gran diferencia en un mundo donde el aprendizaje memorístico y por contenidos tiende a desaparecer.
- Docentes entrenados para aplicar herramientas digitales y recursos tecnológicos de manera significativa.